La alopecia es una palabra que deriva del griego alopex cuyo significado es zorro, debido al hecho de que los zorros sufren la pérdida de pelo en otoño. La alopecia se define como la caída o pérdida patológica del pelo o cabello. Las causas de la caída del pelo pueden ser muchas y, además, no sólo se produce en la cabeza sino que puede producirse en una, varias o todas las partes del cuerpo humano.
El tipo de alopecia o calvicie más común y que afecta sobre todo a los hombres es la llamada alopecia androgenética, un tipo de alopecia que no está causada por enfermedades o daños en el cuero cabelludo. A pesar de su carácter hereditario, en muchas ocasiones este tipo de caída del pelo tiene solución si se trata de manera adecuada. La calvicie o alopecia androgenética empieza a manifestarse con la presencia de de las famosas entradas en los costados de la cabellera, posteriormente surgirá la aparición de zonas sin pelo en la coronilla, continuando con un pérdida progresiva del pelo. Este tipo de alopecia la sufren un noventa por ciento de los hombres mayores de veintiún años.
Causas de la caída del pelo
Como ya he indicado, la caída o pérdida del cabello se puede producir por un número muy amplio de causas: problemas hormonales, falta de nutrientes, estrés, tinturas utilizadas al teñirse el pelo, alisarse o rizarse frecuentemente el pelo mediante calentamiento, problemas de salud, someter el pelo a peinados tensos, etcétera.
La causa de la alopecia androgenética o calvicie común es la testosterona (una hormona producida por los testículos) y la enzima 5-alfa-reductasa. La mencionada enzima convierte la testosterona en dihidrotestosterona (DHT), sustancia responsable que las membranas del cuero cabelludo se pongan cada vez más rígidas, reduciendo el flujo de sangre que llega a la estructura folicular de los pelos, lo que produce al cabo de cierto tiempo que se atrofien los folículos y no pueda seguir saliendo cabello nuevo.
Tratamientos para evitar y prevenir la caída del pelo
Existen algunos tratamientos contra la alopecia que han demostrado su eficacia en la prevención de la caída del cabello:
Comprimidos de finasteride: Este compuesto consigue estimular el crecimiento y detener la caída del cabello. El finasteride actúa directamente reduciendo la producción de la enzima 5-alfa-reductasa, como ya he indicado, una de las responsables de la caída del pelo debida a la alopecia androgenética. Su desventaja con respecto al Minoxidil es que, aunque muy raramente, puede tener contraindicaciones.
Minoxidil: La aplicación de este compuesto sobre las zonas faltas de pelo produce y aumenta el crecimiento de vello en dicha zona. Se han realizado muchos estudios acerca del minoxidil y desde los años ochenta está disponible como loción capilar. Se aplica directamente sobre la zona donde se ha producido la caída del pelo mediante un masaje suave con los dedos.
Trasplante capilar: Se trata de someterse a una operación quirúrgica durante la cual se transplantan unidades foliculares de zonas sanas, en general de la nuca, a la zona afectada. Los resultados obtenidos suelen ser muy buenos, pero la operación puede tener complicaciones por lo que es muy importante acudir a centros capilares con cierto renombre que garanticen los resultados. Estos centros capilares realizarán un estudio previo de nuestro cuero cabelludo para determinar el mejor tratamiento a recibir, que no siempre será un trasplante capilar o de pelo.
Otra solución, aunque no se trate de un tratamiento médico, es ponerse una peluca, el método más barato y socorrido de todos. Actualmente existen pelucas que son prácticamente indetectables. Se trata de una solución muy recomendable para aquellos que han perdido casi todo el pelo de la cabeza.
Si decidimos tratarnos la alopecia y evitar que se nos caiga más pelo, resulta muy recomendable acudir a un centro capilar. Como ya he mencionado, en estos centros nos realizaran un estudio capilar exhaustivo que determinará el mejor tratamiento contra la caída del cabello a seguir, evitando así cualquier tipo de complicación si elegimos un tratamiento inadecuado para nuestro pelo, ya que tanto el minoxidil como el finasteride pueden presentar efectos secundarios o contraindicaciones. Además, existen tratamientos farmacéuticos que se anuncian en farmacias e incluso en la televisión, cuya eficacia sólo ha sido demostrada sobre determinados individuos, entre estos tratamientos se encuentran las terapias con láser, el epilobio, los masajes capilares, el aminexil, el extracto de semilla de uva o algunos ácidos grasos esenciales.
Otros tipos de alopecia
Alopecia areata: Se trata de un tipo de caída del pelo de origen desconocido, aunque recientes estudios apuntan hacia enfermedades autoinmunitarias como la posible causa de esta pérdida de cabellos. Este tipo de alopecia suele presentarse en forma de placas o zonas aisladas en el cuero cabelludo, aunque también puede darse en otras zonas del cuerpo. Esta enfermedad no destruye los folículos pilosos, por lo que el pelo puede volver a crecer aunque son normales las recaídas. La alopecia areata afecta en igual medida a ambos sexos, aparece a cualquier edad y se estima que afecta a una persona de cada mil.
La alopecia también se puede producir por enfermedades sistémicas, enfermedades o síndromes hereditarios, infecciones, neoplasias, dermatosis, síndromes clínicos decalvantes, consumo de drogas, agentes fisicoquímicos, etcétera.